Nuestros niños son los protagonistas de las celebraciones religiosas y vestidos para la ocasión con sus mejores galas hacen las delicias de padres y abuelos, que en un día tan especial recuerdan cómo en otro tiempo no muy lejano ellos también celebraron su primera comunión y hoy se sienten orgullosos de sus hijos y nietos.
Pero además está la fiesta, llena de regalos y sorpresas, donde disfrutar de la compañia de la familia y los amigos pero sobre todo donde descubrir que ya han dejado de ser niños y una nueva etapa aparece en sus vidas.
Perdonad, me he puesto un poco filosófica y lo que quería enseñaros son las galletas de comunión que he hecho para varios niñas. Espero que os gusten tanto como a ellas.
¿Os gustan cómo quedaron los cakepops?
Esta tarta de golosinas fue para la comunión de Carmen.
Las amigas también acompañaron a la niña de comunión.
¡Qué buena pinta tienen estos cupcakes!
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